Me pregunto qué sería si cada individuo lograra reconocer su modelo educativo adquirido desde la infancia y entonces comprender accionando de manera adecuada, consciente y positiva cada aprendizaje tatuado en sus células para su propio bien y por ende el de su prójimo. ¿Estaríamos listos para enfrentarnos a un cambio cultural de pensamiento?...
O preferimos justificarnos con los diversos trastornos que pueden influenciar en la forma de pensar y sentir acerca de uno mismo y de los demás, implicando generalmente conductas violentas, impulsivas y de falta de regulación emocional, en algunas ocasiones involucrando el miedo a la soledad o dando un sentido de superioridad con dificultad para manejar emociones y comportamientos y con frecuentes cambios drásticos de ánimo entre muchos otros rasgos de trastornos de personalidad y es entonces cuando en estos días de encierro se fortalecen haciéndose evidentes y percatándose de las huellas marcadas en el inconsciente aumentando la violencia de género dentro y fuera de casa; si bien estos abusos no responden a un perfil homogéneo dado que cada individuo puede llevar consigo diferentes patrones establecidos desde su infancia por lo tanto un sin número de trastornos que podría afirmar son imposibles de fundar ya que si nos ponemos a analizar a cada sujeto desde los vestigios en sus células, cada segundo tendríamos que volver a estudiar a un nuevo individuo, además de considerar las circunstancias que se viven en ese momento, tal es en este caso la pandemia y sus consecuencias psicológicas.
Si bien una solución a una variable de los trastornos y de las experiencias adquiridas, es aprender desde la infancia a conocernos desde un modelo de pensamiento diferente al impuesto por años, como lo fue el de -Aristóteles quien sostenía que la mujer existía como una deformidad de la naturaleza-, entonces nos daríamos cuenta que tardaría años borrar esos patrones, más sin embargo empecemos a darle el correcto sentido y lugar a la mujer aunque tarde décadas, aun no siendo esta la solución inmediata al problema actual de la agresión misógina consciente e inconsciente tanto de hombres como de las mismas mujeres, que barre por completo nuestras calles marcadas de sangre, desasosiego e inseguridad, si podemos empezar a trabajar por nosotros mismos y dejar de esperar que otros lo hagan por nosotros.
A pesar de ello, una violencia que afecta a más de la mitad de la población mundial no puede ser ignorada, con más de 300 asesinatos al mes, sólo en nuestro país, más un sin número de agresiones diarias, deberíamos exigir acciones que combatan este infortunio. -En 1999, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró el 25 de noviembre Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer como un llamado a gobiernos, organismos, órganos, fondos y programas del Sistema de las Naciones Unidas, para llevar a cabo actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública respecto del problema de la violencia contra la mujer[i]-, 22 años después seguimos con la misma problemática, con una lucha feminista en ocasiones mal dirigida, sin un apoyo real de los gobiernos y por si fuera poco nos topamos con la búsqueda de la liberación ideológica que lejos de ser asertiva encontrando la solución al problema, sólo persuade en una dirección agresiva y fuera de identidad a un gran sector de la población, queriendo anteponer sus derechos por medio de la ofensa incluso a su mismo género, si bien hay organizaciones tanto gubernamentales como privadas que dan apoyo a las mujeres maltratadas y no hablamos sólo de golpes sino incluso de trata de blancas, aún falta mucho para encontrar la solución y evitar que esto continúe, ¿o acaso esto es propiciado desde manos intocables generando un alud imparable?... ¿vale entonces la pena intentar un cambio en el modelo de pensamiento y educación? Hoy le toco a ella una anónima en tu vida, mañana…, mañana puede ser tu madre, esposa o hija, ¿Qué haremos hoy al respecto para evitarlo?
[i] Organización de las Naciones Unidas (ONU). 1999. Resolución A/RES/54/134, Declaración el 25 de noviembre Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Disponible en: https://undocs.org/es/A/RES/54/134
Publicado en Año2 Vol.1 de la revista Ciudad Ideal https://www.idealciudad.org
